El ejercicio de la defensa en los procesos penales debe comenzar desde el momento en que a cualquier ciudadano se le atribuye la comisión un delito o meramente aparece como sospechoso, sin que sea necesario aparecer como imputado en un procedimiento judicial.
Esta previsión en el ejercicio de la defensa permite a nuestro bufete alcanzar mayores resultados de éxito, tanto mediante la evitación del procedimiento judicial, como mediante la evitación de adopción de medidas cautelares gravosas o en una eficaz planificación en la estrategia de defensa. No podemos obviar que el derecho de defensa no se agota con el procedimiento judicial, sino que la flexibilización de nuestro sistema penitenciario ofrece amplias posibilidades de suavizar el rigor punitivo de nuestro código penal.
En materia penal intervenimos en la defensa de nuestros clientes en todo tipo de asuntos. También, como penalistas elaboramos denuncias y querellas interponiendo las reclamaciones oportunas en representación de nuestros clientes. Interponemos todo tipo de recursos durante la instrucción del proceso y contra sentencias, incluyendo al Tribunal Supremo y al Constitucional.
• Defensa y acusación en todo tipo de delitos y faltas.
• Asuntos de alcoholemia.
• Accidentes de tráfico.
• Declaraciones en los juzgados.
• Negligencias médicas.
• Accidentes laborales.
• Denuncias y querellas.
• Juicios con jurado.
• Juicios ordinarios.
• Estafas.
• Lesiones.
• Juzgado de menores.